RTÉ solicitará esta semana un aumento del gravamen de televisión, días después de que el Gobierno británico anunciara una congelación durante dos años ante la posible supresión del canon en ese país.
El canon de televisión irlandés es de 160 euros y se incrementó por última vez en 2008.
El canon británico es de 159 libras al año, unos 190 euros.
RTÉ quiere 30 millones de euros más al año y avanzar hacia la implantación de una tasa de radiodifusión doméstica
En un escrito que se presentará mañana ante la Comisión de Cuentas Públicas, el director general de RTÉ, Dee Forbes, argumenta: «Si no se toman medidas, RTÉ no podrá volver a una posición financiera estable, no podrá reinventarse para las generaciones futuras».
Forbes señala que la emisora «no podrá cumplir con nuestro cometido ni mantener gran parte de lo que hacemos hoy». El canal de televisión padeció una caída de la publicidad relacionada con la pandemia.
Aunque RTÉ obtuvo un superávit de 7 millones de euros en su último ejercicio contable (2020), los ingresos «estuvieron muy por debajo de las expectativas».
El Gobierno anunció en diciembre de 2019 una financiación pública adicional de 9 millones de euros. Sin embargo, esta fue «totalmente absorbida» por el descenso de las ventas del canon.
«Los ingresos comerciales cayeron bruscamente al comienzo de la pandemia y, aunque hubo una cierta recuperación hacia el final del año, siguieron siendo 11 millones de euros menos que en 2019»
Dee Forbes
También señala que el 15 % de los hogares ya no tienen televisores, pero siguen sin tener la obligación legal de pagar por el contenido de RTÉ que transmiten en sus dispositivos.