La estrella de la UFC, Conor McGregor, le pidió al rapero MGK una foto, pero éste se negó, y el incidente terminó en un empujón del cantante al luchador.
Conor McGregor de 33 años, estuvo a punto de pelearse con el rapero Machine Gun Kelly en los MTV Video Music Awards del mes pasado, después de que supuestamente lanzara una botella al cantante de Bloody Valentine.
TMZ afirma que la pelea se intensificó en la alfombra roja cuando McGregor le pidió a MGK, Colson Baker, una foto y la estrella del pop se negó. Se dice que Machine Gun Kelly empujó a McGregor, que derramó su bebida antes de arrojar el resto sobre el artista y su novia Megan Fox.
No es el primer altercado de Conor McGregor
En abril de 2018 el futuro rival de McGregor, Khabib Nurmagomedov, tuvo un pequeño altercado con el amigo del irlandés, Artem Lobov. Dos días después, durante más apariciones promocionales del evento, McGregor y otras 20 personas intentaron enfrentarse a Nurmagomedov, que salía del Barclays Center de Nueva York en un autobús.
McGregor corrió al lado del autobús, agarró una plataforma móvil de metal y la lanzó, rompiendo la ventana del autobús. Los luchadores Ray Borg y Michael Chiesa resultaron heridos y no pudieron participar en el evento. Se le acusó de tres cargos de asalto y un cargo de daño criminal.
Los dos ya habían escalado su disputa con un intercambio de palabras en Twitter el año pasado, con McGregor llamando a Khabib una «rata escurridiza y escondida».
Más peleas en bares
A lo largo de los años, el peleador irlandés también volvió a tener problemas con la ley. Una vez tuvo un altercado en un bar de Dublín y fue condenado a pagar una multa de 850 libras.
Antes de anunciar su regreso a la UFC, McGregor fue filmado golpeando a un hombre en un bar de Dublín en abril de 2019. Las imágenes de CCTV publicadas por el sitio web TMZ muestran al luchador de MMA, de 32 años, descargando un golpe sobre el bebedor, de unos 50 años, antes de ser alejado por sus amigos. La víctima, imperturbable, apenas se mueve tras el ataque y permanece sentada en su taburete del bar.
McGregor declaró más tarde a ESPN su arrepentimiento por el incidente: «Ese hombre se merecía disfrutar de su tiempo en el pub sin que terminara como lo hizo. «Intenté enmendar la situación y me enmendé entonces. Pero no importa. Me equivoqué. Debo presentarme aquí ante ustedes y rendir cuentas y asumir la responsabilidad. «Sea lo que sea lo que me llegue, lo afrontaré. Lo que me llegue, me lo merezco». El luchador fue posteriormente multado con 860 libras tras declararse culpable de los cargos.